La premisa de MUNDO TENEBROSO es interesante: la vida de una tribu de seres humanos viviendo en la total oscuridad como ¿cómo se llega hasta ahí? Según el libro tras una catástrofe apocalíptica que ha llevado a la humanidad a refugiarse en túneles y cuevas hasta que, con el tiempo, se han adaptado a ese entorno y, prescindiendo de la luz, son capaces de transitar y vivir en ese entorno guiándose únicamente mediante la eco-localización y alguna otra técnica que no depende de la luz.

Jared Fenton es uno de esos supervivientes. Su tribu sobrevive a pesar de las amenazas de varias criaturas horripilantes, como ciertos murciélagos gigantes y, sorpresa, otros humanos muy peligrosos debido a sus extraordinarias habilidades: son capaces de detectar cualquier presencia incluso en el más absoluto silencio.

La contraposición Luz y Oscuridad es una entelequia para el y su tribu, han olvidado todo lo que está relacionado con la vista y para ellos Luz y la Oscuridad se han convertido en conceptos religiosos, más allá de su propio significado. A Jared le gustaría entender la verdadera naturaleza de esos conceptos, y en su búsqueda más allá de las cuevas le lleva a enfrentarse a aventuras y sucesos asombrosos.

Las cosas se empeoran cuando los manantiales que permiten sobrevivir a la tribu se secan, y Jared es acusado de haber hecho caer sobre ellos una maldición a acusa de su búsqueda de la luz.

Esta novela me ha recordado mucho a un vuejo relato que fjsi, me ha ayudado a recuperar: TUMITHAK DE LOS CORREDORES (Charles R. Tanner). En ese relato, Tumithak también vivía en un mundo subterráneo en el que la humanidad se había refugiado a causa de la invasión de unas espeluznantes arañas alienígenas. A diferencia de Jared, Tumithak veía perfectamente y tenía pocas dudas religiosas, aunque los peligros a los que se enfrentaba en sus corredores no eran menores que los que Jared tiene que afrontar, pero no deja de ser curioso el paralelismo entre ambos relatos, por lo que no descarto que Galouye se inspirara en el héroe de Tanner.

Pero mientras que el mundo de Tumithak es más bien simple, consecuencia casi directa de su origen pulp, la cultura del pueblo de Jared es extensa y elaborada. Hay una memoria distorsionada del pasado, el lenguaje se ha adaptado a la total oscuridad, y todo lo referido a la catástrofe original se ha convertido en una religión, en la que incluso la visión es una forma de posesión por parte de demonios antiguos.

Jared es un iconoclasta y en cierto modo intuye que detrás de los mitos y leyendas de su pueblo hay una verdad más grande que intenta desentrañar, pero las herramientas de las que dispone son muy limitadas, ni siquiera, aunque las intuye reales, es capaz de comprender la naturaleza de la Luz y la Oscuridad.

Si nos ponemos filosóficos, se puede describir MUNDO TENEBROSO como una parábola acerca de la pérdida del conocimiento hasta convertirlo en un recuerdo distorsionado y de carácter religioso, pero que a la vez, es posible recuperar siempre se que sepa mirar (valga la ironía) en lo recovecos de la superstición y la tradición, para devolver de nuevo la razón al mundo.

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