Llevaba bastante tiempo (como unos 2 años desde que oí hablar de él) esperando poder leer este libro, y debo decir que no me decepcionó en absoluto. Dicho eso, empecemos con el análisis. Sé que hay tres ediciones en castellano: en Ultramar (Ciencia Ficción Bolsillo nº 48), en Bruguera y en Salvat, pero yo no las he leído, así que no puedo decir nada sobre la calidad de la traducción. Las tres traducciones son de 1975.
Lo primero que creo que debo preguntarme cuando acabo de leer un libro es: ¿Me ha gustado? Y la respuesta en el caso de esta obra es: Sí, me ha gustado. Ahora bien, ¿es un libro fácil? A esto hay que no responder: No. ¿Está bien escrito? Sí, el estilo de Joanna Russ es elaborado sin ser pesado, y rápido sin ser descuidado. Sus descripciones son ágiles, y la profundidad de su descripción psicológica es detallada sin ser farragosa. Y si esto es así, ¿de dónde proviene la dificultad de lectura? Del cambio constante de narrador entre uno y otro capítulo. El yo narrador cambia constantemente de una a otra de las cuatro protagonistas.
Dejaré a otros el decir si THE FEMALE MAN es un libro de ciencia-ficción. Lo es para mí, pero puede que haya quien se rasgue las vestiduras. Y, ¿de qué va? Pues del encuentro e interacción de cuatro mujeres distintas que viven en cuatro realidades diferentes: Jeannine, Joanna, Janet y Jael. Jeannine es una bibliotecaria que vive en un mundo en el que la depresión del ´29 nunca terminó. Joanna vive en el mundo contemporáneo, en los años 70. Janet procede de una realidad utópica separatista donde no hay hombres, en la que la Tierra se llama Whileaway. Y Jael es una luchadora de dientes de acero y garras retráctiles en cuyo mundo los hombres y las mujeres viven separados y luchan constantemente entre sí.
La única pega que le he visto a la novela es que sus retratos masculinos se han quedado un poco anticuados. No demasiado: muchas de las situaciones y experiencias que ocurren en la novela son perfectamente actuales, pero (a mi juicio) los personajes masculinos de Russ, sin sufrir el vitriolo que hemos recibido los hombres por parte de otras autoras de fabulación feminista (y uso el termino de Marleen S. Barr), si se han quedado algo acartonados, aunque cumplen perfectamente su papel como retrato de las actitudes machistas de los 70.
En resumen: un libro que vale la pena leer. Aunque de difícil lectura, es recomendable por su calidad literaria y por las preguntas que genera en el lector. Yo le daría un 3, 5 aunque yo necesité una segunda lectura para apreciarlo con objetividad.
