
EL ÚLTIMO DÍA DE LA CREACIÓN es un libro que realmente vale la pena leer: es entretenido, con una trama original, da una visión diferente de la Atlántida y es pura ciencia-ficción de viajes en el tiempo.
Por lo que se refiere al autor, como indica el título de éste post, se trata de Wolfgang Jeschke, un autor alemán reconocido a nivel internacional, pero que confieso que no conocía y que por lo tanto, no había leído nada suyo con anterioridad. Tendré que poner remedio a esto.
El libro empieza narrando diferentes episodios en los que se encuentran extraños objetos cerca de la cuenca del Mediterráneo, que aunque parecen provenir de un pasado muy lejano, están hechos de materiales que existen desde hace poco, o en algunos casos, que aún no se han inventado.
También explica cómo algunos de estos objetos anacrónicos acaban siendo venerados como reliquias por la tradición cristiana.
Una segunda parte del libro ocurre durante la década de los 80´s del siglo XX (momento en el que fue escrita la primera edición de éste libro) donde tenemos la NASA y la Marina de los EEUU que acaban de descubrir que es posible viajar al pasado.
La tercera parte de la narración está situada en pasado remoto en el que los únicos Homo sapiens sapiens son los que han llegado del futuro... aunque no únicamente los de nuestra línea temporal.
Con referencia a la Atlántida (sigo dedicándome a leer libros en los que se habla de ella) la sitúa en las Bermudas y es un reducto en el que se refugian los hombres que han viajado al pasado y han quedado varados en el tiempo. De ésta manera explica tanto los fenómenos extraños que fueron tan populares el siglo pasado en las Bermudas, así como el origen de la leyenda de la Atlántida. La explicación es bastante convincente.
El libro se lee bien y engancha, así que en tres o cuatro días con algo de tiempo libre, puede leerse.
Sólo hay un par de cosillas negativas... y no son culpa del autor, sino que me temo que es obra del traductor:
1. - En varios capítulos del libro se habla de la teoría de la Tectónica de Placas y en lugar de escribir tectónica
el libro indica teutónica
pero no una vez (eso podría ser considerado un error tipográfico) lo hace varias veces, en diferentes sitios y con variantes de la palabra. Así que como el autor es alemán y las placas son teutónicas
, cuando el libro indica que hay fuertes movimientos teutónicos en la zona limítrofe de la cuenca mediterránea
da un poco de risa imaginarse a todo un grupo de alemanes moviéndose por la cuenca del Mediterráneo y modelando el relieve.
2.- La otra es de vocabulario... el autor hace referencia varias veces a un barco con vela latina que navega por el Mediterráneo. El capitán del barco indica en diferentes momentos que al dormir o al descansar deben atar el remo
. El autor se está refiriendo a la caña del timón, que en los barcos de vela latina se parece bastante a un remo, pero no es un remo es una caña
. No sé en alemán qué debió escribir el autor...
Éstas dos anécdotas no quitan que el libro es 100% recomendable y que vale la pena leerlo y pasarse un buen rato pensando en paradojas, anacronismos y en diferentes líneas temporales.