1348: Una epidemia de peste esta asolando Inglaterra. En un pequeña aldea del norte un joven esta teniendo una serie de visiones que no puede comprender ni explicar. Aún no ha llegado la peste, pero todos los aldeanos temen su inminente llegada. Ante el pavor general, el chico sirve de guia a un grupo de hombres a cruzar un agujero que les conducira al otro lado del mundo.
Sin embargo, el otro lado resulta ser la Nueva Zelanda del siglo XX, donde estos hombres del medievo tendran que enfrentarse con los horrores de la vida moderna.
Pues sí, existe una película con tan sugerente título (no confundir con otra titulada EL VIAJE DEL NAVEGANTE). Algunos ya la recordaréis, pero me temo que la mayoría no. Y es que pasó bastante desapercibida en su estreno (es de los 80). Recuerdo haber leído alguna crítica muy positiva de la misma, recibió dos premios de cine fantástico, incluido el de Sitges del 88 y fue vista por sólo 220759 espectadores (Ojalá yo fuera uno de ellos). Posteriormente fue estrenada en el Canal más.... y creo que ese es todo su historial cinematográfico.
Ayer la recordé. Fue cuando hablando sobre músicas salió el tema de su banda sonora (bastante impresionante).
Si alguien quiere hacer algún comentario de la peli... bienvenido sea. Ahora, brevemente cuento de que va para ver si consigo que algún alma descarriada que se la encuentre en esos polvorientos rincones (no ese tipo de polvorientos rincones que algunas mentes depravadas piensan se anime a cogerla.
La intemporal odisea parte desde el siglo XII o XIII, el algún lugar del norte europeo, con la famosa Peste Negra como trasfondo (como con Connie Willis... Promete ¿verdad? sólo que aquí el viaje en el tiempo es al revés..).. Un grupo de aldeanos deciden peregrinar a una Catedral (supongo que debería ser Santiago) y para ir más rápido cavan un agujero en la tierra... aparecerán en una macro-urbe del siglo XX (creo que era Sidney). A partir de ahí todo es imaginación visionaria y épico lirismo acompañado de una perfecta banda sonora (jo, vaya frase; entreno para crítico de periódico je, je, je)..
Recomendada queda a todos, eso suponiendo que consigáis una copia en video porque no creo que se programe ningún reestreno, si acaso en algún cineclub.

Pues el caso es que yo fui uno de los 220.759 espectadores y... la verdad, no tengo un recuerdo excepcional.
El comienzo de la película promete, con los mineros atravesando la tierra a golpe de pico y pala hasta llegar al presente (creo recordar que llevaban una cruz, como ofrenda a no se qué catedral).
El procedimiento es, cuando menos, original; pero no pienso ponerle la mas mínima pega. Al fin y al cabo, dos de los cuentos que mas me gustaron el año pasado fueron LA TORRE DE BABILONIA, de Ted Chiang y EL FINAL DEL EJE de Alasdair Gray, y ambos van de alcanzar la cúpula celeste a base de construir una gran torre. Así que mi objeción no es del tipo técnico-científico.
Lo que pasa es que, una vez en nuestro mundo, una gran parte de la fascinación se pierde. Entramos en unas cuantas escenas de asombro ante los dragones que corren por las autopistas, y todo el argumento se diluye en una especie de misticismo que incluso acaba dando la razón a las premisas religiosas de nuestros visitantes.
En fin, que he visto películas peores (mucho peores, incluso) pero tampoco creo que sea para llorar demasiado si os la habéis perdido.