
Los tres libros que componen AZOGUE cumplen con la función de entretener y deleitar perfectamente y eso también es debido a que su autor sabe manejar la pluma como nadie. Stephenson ya había sorprendido anteriormente con un par de novelas tituladas SNOW CRASH y LA ERA DEL DIAMANTE. Cuando publicó CRIPTONOMICÓN la novela anterior a esta que estoy comentando, ya no cabía duda que a este autor había que considerarlo como un peso pesado de la ciencia-ficción y no perderlo de vista. No obstante ni AZOGUE ni CRIPTONOMICÓN son ciencia-ficción, pero tienen algo en común con el género tanto en la historia que cuentan como en los personajes que participan en la misma. La temática de AZOGUE es nada más y nada menos que el nacimiento de la ciencia moderna, y los personajes que participan en la misma son entre algunos de los más famosos científicos de la historia: Newton, Leibniz, Boyle, etc...
Con estos elementos y otros añadidos que pertenecen a la historia política y general de la época, Stephenson ha combinado un cóctel explosivo. Pero no acaba aquí la cosa pues los tres libros que conforman AZOGUE son sólo la tercera parte de la monumental obra que ha realizado Neal Stephenson titulada El Ciclo Barroco y que Miquel Barceló ha prometido publicar en su colección Nova. Si a esto unimos además la circunstancia que algún personaje que ya apareció en el CRIPTONOMICÓN aparece ahora también en El Ciclo Barroco, nos encontramos en total con la friolera de doce libros escritos por un mismo autor y pertenecientes a un mismo universo.
Neal Stephenson nos conduce en esta obra a la turbulenta y complicada historia europea del siglo XVII. Al margen de los protagonistas principales de la narración tendremos noticias de otras ilustres figuras de esta época. El primer tomo de la obra se centra en la figura de Daniel Waterhouse y sus contactos con Newton y Leibniz en aras de crear una ciencia moderna y erradicar de una vez por todas la alquimia. En el segundo tomo tenemos como protagonista a Jack Shaftoe, un buscavidas que se las apaña para salir indemne de todas las situaciones complicadas en las que se coloca. Jack conocerá a Eliza una concubina del sultán turco y que está dotada no sólo de bellas cualidades físicas. Sobre Eliza recaerá todo el peso de la trama en la tercera parte de la obra.
Pero como he dicho, esto no ha hecho nada más que comenzar pues todavía quedan seis libros y como sean tan buenos como estos tres la diversión está garantizada. Aunque he mencionado arriba que esto no es ciencia-ficción, para mí es igual, como si lo fuera, pues he disfrutado leyendo la obra en cuestión. Existe el prurito de que el aficionado al género sólo lee ciencia-ficción, y creo que esto no es verdad. Creo que el buen aficionado tiene una mente inquieta e inquisitiva que le lleva a bucear en muchos otros temas afines. ¿Y que mayor afinidad se puede encontrar entre la historia de la ciencia y la ciencia-ficción? Por tanto AZOGUE es una obra que no sólo está recomendada para el aficionado al género, sino también para todos los públicos. Disfutadla tanto como yo la he disfrutado.
ANATEMA
AZOGUE
EN EL PRINCIPIO FUE LA LINEA DE COMANDOS
LA ERA DEL DIAMANTE
SEVENEVES
SNOW CRASH