Sitio de Ciencia-Ficción
por Alfonso de Terán Riva

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El Windows «Táctil»
El Windows «Táctil»

Hace pocos días, Microsoft anunció una de las novedades de la nueva versión de Windows, realizando una demostración con una pantalla multi-touch. Como es habitual en noticias relacionadas con la informática, la mayoría de los medios no han entendido bien qué es lo novedoso (y qué no) Así, podemos leer titulares como Windows 7 será táctil, La próxima versión del sistema operativo Windows permitirá funciones táctiles, o El próximo Windows 2007 funcionará con pantallas táctiles. ¿Y cuál es el problema? Pues que el hecho de que Windows o cualquier otro sistema operativo, pueda funcionar con pantallas táctiles, dista mucho de ser una novedad. Lo novedoso es que soportará lo que se denomina multi-touch (que podríamos traducir como multi-tacto)

Las pantallas táctiles aparecieron hace ya bastante tiempo. Seguro que muchos de vosotros las habéis visto y utilizado en determinados museos o exposiciones, o simplemente en el Metro de Madrid (las máquinas expendedoras) Para que una aplicación o un sistema operativo pueda utilizar una pantalla de este tipo, no es necesario hacer nada en el programa, específico para ese dispositivo (salvo diseñar una apariencia amigable) Por norma general, una aplicación (el sistema operativo en realidad) no se comunica directamente con el hardware, sino que para ello se utilizan los llamados drivers o controladores. Estos controladores son pequeñas piezas de software que proporcionan a la aplicación que los utiliza, un interfaz determinado. La idea es que no importa la marca del dispositivo (un disco, un DVD, un ratón) o cómo esté fabricado, o cómo funcione internamente, sino que el controlador se encarga de proporcionar a la aplicación un interfaz conocido. Así, la aplicación no necesita estar preparada para las peculiaridades de cada aparato.

Pensad por ejemplo en un coche. Independientemente de cómo esté hecho el motor, o la electrónica, tendrá un volante en el asiento del conductor, así como un pedal para acelerar y otro para frenar. Tenemos un interfaz entre el coche y el conductor, que aparece en todos los modelos y marcas.

Otro ejemplo lo tenemos en los ordenadores portátiles. Aunque les podemos conectar un ratón, todos tienen su propio dispositivo que cumple la misma función, como un pequeño botoncito en medio del teclado o una pequeña superficie táctil. El sistema operativo tendrá instalado el driver adecuado, de forma que no sabe (ni necesita saber) qué es lo que está actuando exactamente como ratón. Podríamos incluso inventarnos un nuevo dispositivo, como un mando similar al de la Wii, programando un driver que traduzca la información de movimiento del mismo, a la esperable de un ratón. Nuestro sistema operativo no necesitaría ningún tipo de actualización (salvo la instalación del driver, claro)

He elegido el ejemplo del ratón de forma deliberada. Imaginad que tenemos una pantalla táctil, y que el fabricante nos proporciona un driver adecuado, de forma que nuestros toques en la pantalla se traduzcan en clicks de ratón (en realidad, serían eventos de pulsar y soltar el botón, según apoyemos y levantemos el dedo, pero dejemos los detalles) Como podréis imaginar, el sistema operativo no tiene que estar implementado de forma especial. De hecho, mi primer trabajo consistió en hacer una pequeña aplicación de ventana completa, que sería utilizada con una pantalla táctil. Se ejecutaba en Windows 95 (cómo pasa el tiempo) y durante todo el desarrollo y las pruebas, utilicé un PC normal y corriente. Sólo en la última fase se instaló en un PC con pantalla táctil, y no fue necesario hacer nada, salvo instalar correctamente el driver de la pantalla.

Las pantallas táctiles convencionales, tienen una limitación, y es que sólo funcionan correctamente si las tocamos con un sólo dedo cada vez. Si las tocamos con dos o más dedos simultáneamente, tendremos efectos no deseados, posiblemente que el puntero se posicione en algún punto indeterminado entre los dedos. El motivo es evidente: independientemente de que la tecnología de la pantalla permita la detección precisa de varios toques simultáneos (puesto que hay pantallas que directamente no son capaces de ello) debemos traducir la información a las coordenadas de un único puntero (la flechita que movemos por la pantalla, a la que se en ocasiones se le llama también ratón, de forma errónea) Y es aquí donde está realmente la novedad. Si disponemos de una pantalla multi-touch, capaz de detectar la posición de toques simultáneos, y queremos que esa capacidad sirva para algo, no podemos simplemente traducirla a eventos de ratón. Necesitamos que nuestro sistema operativo haga algo diiferente. Y ahí está la novedad de la nueva versión de Windows: el soporte multi-touch, para poder hacer las virguerías del famoso iPod Touch de Apple, como tocar con dos dedos sobre una foto, y separarlos o juntarlos, para aumentar o disminuir su tamaño.

Es decir, no es ninguna novedad que Windows se pueda utilizar con una pantalla táctil. Eso ya se podía hacer desde hacía una década. La novedad es que se pueda utilizar con pantallas multi-touch.

© Alfonso de Terán Riva, (822 palabras) Créditos
Publicado originalmente en MalaCiencia el 6 de junio de 2008
CC by-nc 2.5
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Para una referencia más amplia sobre pantallas táctiles puedes consultar:
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