
Hoy volvemos con la serie Kyle XY, y con algo que tiene que ver con el anterior artículo que escribí sobre la serie. En el primer episodio de la segunda temporada el creador de Kyle le habla sobre el desarrollo del cerebro durante la gestación. Dice que Albert Einstein nació unas semanas fuera de cuentas, por lo que su cerebro pudo desarrollarse durante más tiempo, y por eso fue un genio. Partiendo de ese dato, se hicieron experimentos para tener recién nacidos con el cerebro más desarrollado, retrasando el parto. El problema era que las madres morían durante el mismo, por lo que se desarrolló una especie de útero artificial donde gestar los sujetos. Así, le revela a Kyle que él se gestó en una de esas máquinas, durante casi toda su vida, hasta poco antes del inicio de sus recuerdos.
Bueno, no sé cuánto hay de cierto en la historia de Einstein. Se dice que su cerebro era más grande que la media, aunque desconozco si es cierto o no, o si la desviación de la media es significativa. Lo importante aquí es la hipótesis de que cuanto más tarde el niño en nacer, más se desarrollará el cerebro, y más inteligente será. Y es que, aunque es cierto que cuanto más tarde en nacer, más desarrollado estará el cerebro (y otras partes del cuerpo) se está dejando de lado un dato fundamental, y es que el desarrollo del cerebro no se detiene al nacer. El cerebro de un bebé continúa desarrollándose y creciendo tras el parto.
Una persona que haya tenido hijos (o sobrinos, o amigos con niños) se habrá percatado del pequeñísimo tamaño del cráneo de un recién nacido, en comparación con el de un adulto. No pensaréis que mientras el cráneo crece, el cerebro permanece con el mismo tamaño, dejando un enorme hueco dentro de la cabeza (bueno, tal vez conozcáis a algún individuo que os lleve a pensar eso) Nuestro cerebro es el mayor arma de nuestra especie, pero tiene un precio (más de uno, en realidad): ante la limitación que impone el canal del parto (unos 10 centímetros de ancho) nos vemos obligados a nacer con el cerebro a medias, por decirlo de alguna manera. Si nuestro cráneo creciera más antes del parto, simplemente no podríamos atravesar el canal.
No somos la única especie a la que le ocurre, pero sí en la que la diferencia entre el cerebro neonato y adulto es mayor (en la Wikipedia he leído que la capacidad del cerebro de un neonato es un 25% de la de un adulto, pero no sé a qué se refieren con capacidad; si alguien conoce datos precisos, se lo agradecería) De todos es conocida la indefensión y escasa capacidad de un recién nacido humano, en comparación con otras especies. Un pollo recién salido de su huevo, puede dar ya unos pasos. Un potrillo recién parido, puede incorporarse de forma medianamente aceptable sobre sus patas. Pero un bebé humano tiene muchas de sus futuras capacidades mermadas. No digamos caminar o hablar (aunque sí tienen un reflejo de marcha, que es digno de ver) pero es que ni gatea, ni repta. Nacemos con los las capacidades básicas para sobrevivir con ayuda de una madre (como succionar lo que nos metan en la boca)
Durante los primeros meses, el crecimiento es espectacular. Luego, aunque más lento, prosigue hasta llegar a algún momento entre los 5 y 7 años. ¡Vaya! ¿Y si el desarrollo continuara durante toda la infancia y adolescencia, seríamos capaces de crear supergenios, como en el caso de Kyle? Pues no sé. Pero recordemos que el cráneo de Kyle aparentemente tiene un tamaño normal. Tendríamos que pensar en algún proceso desconocido que aumente el desarrollo del cerebro, sin aumentar su tamaño (y me refiero a desarrollo fisiológico)