Pionero de la astronaútica rusa (1857-1935). En 1883 expuso en su libro EL ESPACIO EXTERIOR los principios que permiten el desplazamiento de un cohete por el vacío, y en 1895, en SUEÑOS DE LA TIERRA Y EL CIELO, las posibilidades de un satélite artificial. Aunque Tsiolkovski no llegó a lanzar jamás un cohete, se le considera uno de los pioneros en este campo por sus ideas sobre las ventajas de los ingenios de combustible líquido, los problemas de la aceleración en los viajes tripulados y un sinfín de otros aspectos. Su casa en la aldea de Kaluga, donde vivió y trabajó, es hoy en día un museo nacional dedicado a su memoria. Uno de los más importantes accidentes de la cara oculta de la Luna es el cráter que lleva su nombre, cuyo fondo parece estar cubierto de materiales muy oscuros.
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