Se trata de una tablilla sobre la que se puede dibujar o escribir con un lápiz electrónico. Su ventaja sobre el ratón está en la precisión que podemos alcanzar con ella y en que no es necesario que aparezcan en la pantalla las diversas opciones del programa. En la propia tableta se pueden reservar espacios para cada una de ellas, como si se tratara de la paleta de un pintor.
Precisamente el nombre de tableta gráfica viene dado por su uso intensivo en aplicaciones gráficas, como el diseño asistido por ordenador (el famoso CAD-CAM) o en la manipulación de fotografías o imágenes de vídeo y en la generación de los espectaculares efectos especiales que se ven cada vez más en las películas.